viernes

Abecegrama

-A que eso era todo lo que pretendías... -la voz de la chica se quebró al final de la frase.
-¿Borraste la marca de la pared? -preguntó el chico, con voz apremiante, ignorándola.
-Cada recuerdo... ¿es una farsa? -la chica alzó el mentón y se encontró con sus ojos. En ellos había el brillo de la victoria, la euforia imparable que le dominaba. Se hallaba perdido en su guerra ganada, y parecía no verla.
-Día tras día te mentí, sí -respondió sin prestarle mucha atención. Ahora mismo aquello no era lo que más le importaba-. ¿La borraste, o no?
-Entré en aquella habitación -susurró ella, con el rostro ausente-, vi las marcas, grandes, pintarrajeadas con un lápiz -se detuvo un momento, pensando-. Apenas eran ya visibles.
Falacias era todo lo que él le había contado. Cada promesa, cada beso y abrazo, todos aquellos días en que ella había creído amarlo... Eran una farsa.
-¿Grandes? ¿Marcas? ¡Me dijiste que sólo había una! -él rugió de furia y agarró con fuerza sus brazos, sacudiéndola. -¿Me estás diciendo que lo que me dijiste era un simple cuento?
-¿Historias? Éso es sólo lo que alguien tan despreciable como tú haría -escupió ella, y le dirigió una mirada cargada de ira. Con una fuerza impensable en ella, le empujó y se apartó de él.
Invenciones. Menuda ironía. Y era él el que se atrevía a decírselo a la cara, a acusarla de mentirosa. Cuando precisamente él había hecho lo único que era capaz de herirla, lo único que podía hacerla sentir tan desdichada como en aquel preciso instante. Pero ya no se sentía contrariada, no. Ahora sólo sentía el odio irracional hacia él.
-Kvahlja te matará por decir tales cosas sobre mí. Lo pagarás caro -dijo él amargamente, mientras se acercaba de nuevo para retenerla.
Le hizo pedazos! ¡Lo vi ante mis ojos! Ya no hay nada que tema perder -respondió con un deje de desesperación en su voz. -. Él era todo lo que me importaba.
-Mató a Gabriel porque era lo que debía hacer. Compréndelo, es lo mejor para todos. En el fondo lo sabes, cariño.
No me llames así nunca más en tu repugnante existencia! -gritó ella, abofeteándole la cara. Sentía cómo el od.io corría por sus venas, corroyendo su sangre de unas amargas ganas de venganza.
-No Obstante... Me sigues queriendo, ¿verdad? -sonrió de manera socarrona, como si el puñetazo no le hubiera afectado en absoluto. -Sigues siendo débil.
Pretender que yo te quiera ya es demasiado! -dijo ella, histérica. Hervía de rabia. Quería lanzarse sobre su cara y arrancarle a pedazos la piel, tira por tira, hasta que quedara en carne viva y se lamentara por todo lo que había hecho. Pero sabía que éso era lo que él quería que pasara: que la ira le cegara y le hiciera perder el control. La chica inspiró hondo e intentó relajarse. Si mantenía la mente despejada y clara, podría lograr pensar un plan que acabara con su vida. ¿Pero cómo podía llegar hasta sus defensas si Kvahlja estaba de su lado? También podía matarla. No...
Quitarla del medio era demasiado peligroso. Nunca podría vencerla, y él debía pensar que su plan se estaba llevando a cabo a la máxima perfección. Lo mejor que podía hacer era fingir una reacción imaginable: la que probablemente él estaba esperando.
Repercutiría en su seguridad, que precisamente se vería quebrantada más tarde por ella. Luego...
...Sus defensas se romperían y ella podría matarlo con sus propias manos.
Trapicheos! Llévatela de aquí, y que no me vuelva a molestar con estupideces. Ahora que poseo el poder de Gabriel nada debe interponerse en mi camino.
Únicamente un hombre entró a la sala y agarró con fuerza a la chica, hiriéndole los brazos. Ella pataleó, furiosa, pero el hombre estaba bien curtido y apenas notó un pinchazo por parte de sus débiles puños. Aquello no iba a acabar así. Una sonrisa oscura y amarga se instaló en su rostro, e hizo sentirla más podrida que nunca por dentro. Seguiría planeándola...
Venganza.


Así Borraste Cada Día: Entre Falacias Grandes, Historias, Invenciones.
Kvahlja Le Mató, No Obstante Pretender Quitarla, Repercutiría Sus Trapicheos: Únicamente Venganza.



PD: Intento de Abecegrama. Lo sé, el texto no tiene mucho sentido, pero ha sido difícil
crearlo. Respecto a las letras... Lo sé, faltan las tres últimas, pero no encontraba nada.
(Y el párrafo de "Trapicheos" es horroroso. Pero ha sido divertido).

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